Panda vivía en un taller mecánico, donde era maltratado por personas y perros e incluso muchas veces no tuvo alimento ni agua, de acuerdo a los testimonios de quien finalmente consiguió que se le entregara para buscarle una mejor vida. Fue así como Panda llegó a nuestro refugio, donde poco a poco ha encontrado personas de confianza para salir a pasear, ser cepillado, etc. A pesar de esto, este pequeño aun es un perrito ansioso, muchas veces gira en círculos o persigue sombras, pero no es agresivo y confiamos que con amor y paciencia y el apoyo profesional pertinente, Panda se adaptará muy bien a la familia que decida darle una oportunidad y será un perrito feliz.
Nacimiento: Marzo 2019.
Tamaño: mediano.
Esterilizado: si.